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Me considero algo especial con respecto a las vaginas, recuerdo que en mis años mozos termine con muchas de mis novias porque ya no apretaban tan chido, por eso a veces pensé en nunca casarme porque no sabría qué hacer cuando en llegado momento mi mujer dejara de apretar. Los años pasaron y siempre me sentí bien con mi pareja actual, hasta hace apenas un año más o menos, cuando dejó de apretar. Por ello comencé a buscar un par de opciones y sin duda la mejor era su sobrina, pues a lejos se ve que le encanta la verga y antes de que alguien me ganara me acerque a ella. Tarde un par de meses en convencerla, pero cuando por fin se animó a tener sexo, resultó como lo esperado, tiene una vagina bastante estrecha.
